Eran
las 18:50 (una hora más en Finlandia) y los más de 10000 aficionados
finlandeses que abarrotaban el Sonera Stadium se frotaban los ojos ante la gran
primera parte que había hecho el HJK.
Con 2-0 en el marcador y anulando por completo a un rival superior se soñaba
con disputar la próxima edición de la Uefa Champions League.
El
escenario era el ideal, restaban 45 minutos y el APOEL contaba con tres de sus
cuatro defensas amonestados con tarjeta amarilla. Con el equipo chipriota
obligado a volcarse en busca de un gol el HJK iba a disponer de muchos espacios
para destrozar en velocidad a la debilitada defensa visitante.
Y es
que la primera mitad había sido excelente, Savage fue el autor de los dos goles
del HJK en una exhibición del jugador Gambiano. El primer gol llegó en el ´11 tras
una gran conducción por banda izquierda tirando diagonal hacia el área y
soltando un latigazo con la pierna diestra al palo corto.
El
segundo fue un gol psicológico que llegó en el ´44 y de penalti por un claro derribo
a Alho dentro del área.
Los
Kandji, Savage, Alho y compañía estaban en disposición de sentenciar la
eliminatoria con su velocidad provocando alguna expulsión y/o marcando algún gol más para dejar todo
finiquitado. Pero el fútbol es imprevisible y todo puede cambiar en cuestión de
un segundo por alguna jugada puntual o decisión arbitral.
Y eso
fue lo que pasó, corría el ´49 cuando Macoumba Kandji hizo una estúpida falta a
Vinicius en campo rival en una jugada que no entrañaba ningún peligro para el
equipo. Esta tontería de Kandji dejó con diez al equipo a falta de más de 40
minutos para el final del partido. Opino que el club debería sancionar al
jugador porque se cargó el trabajo de todo el equipo por esa acción infantil.
El equipo
acusó mucho la inferioridad numérica y se echó atrás ante el empuje del APOEL
que olió la sangre y se lanzó en busca de la remontada. Y tanto fue el cántaro
a la fuente que al final se rompió con un gran cabezazo de De Vincenti en el
´71, el delantero argentino se colocó entre Lampi y Heikkinen y remató a
placer.
Y tres
minutos después el 2-2 obra del gigante irlandés Sheridan que cabeceó a la red
a escasos metros de la línea de gol tras otra buena jugada por banda derecha. El
balón superó a Moren y Törnes no pudo hacer nada.
Lehkosuo
intentó oxigenar al equipo dando entrada a Väyrynen, Baah y Mannström para al menos salvar un empate y
el resultado ya no se movió.
Al final los apenas 100 seguidores chipriotas
desplazados a Helsinki celebraron a su manera el resultado logrado por su equipo.
Un resultado que una hora antes era impensable para ellos.
Ahora
tenemos una empresa muy complicada, la semana que viene estamos obligados a
ganar en Nicosia o a empatar a más de dos goles. La temporada pasada sólo
perdieron un partido en su estadio, fue el pasado 26 de abril cuando cayeron
1-2 ante el Ermis.
Veremos
cómo gestiona Lehkosuo la baja de Kandji para el partido de vuelta, puede optar
por la velocidad de Konan o por la experiencia y mayor calidad técnica de
Mikael Forssell que aunque es más lento que el Costamarfileño tiene más gol.
No
tenemos nada que perder, si ayer fuimos superiores en Nicosia también podemos serlo.
Para el próximo miércoles habrá que tener más cuidado con los balones aéreos,
ayer el APOEL creó todo el peligro con balones al área y remates de cabeza. Así
llegaron los dos goles y un remate al palo en la primera mitad.
Sobreviviremos
al infierno chipriota?
Törnes,
Sorsa, Moren,Heikkinen, Lampi, Tainio, Schüller (´76 Väyrynen), Alho (´77 Baah),
Robin Lod (´87 Mannström),Savage y Kandji