El HJK
sigue vivo en la pelea por el título tras lograr la victoria en Tampere ante el
Ilves, un equipo que sólo había perdido un partido en su estadio esta temporada
y que además, también se jugaba medio título en el envite.
Para la
cita el HJK contaba con la baja de Alfredo Morelos, el goleador colombiano
cumplía sanción por acumulación de tarjetas y Lehkosuo tuvo que improvisar.
Alineó
un 4-1-4-1 con Jalasto y Taiwo en los laterales, Rexhepi (que volvía tras muchos
partidos en el banquillo) y Tatomirovic en el banquillo. Annan por delante de
la defensa con Dahlström y Kolehmainen como interiores un poco más adelantados
y Odu y Rafinha en los costados. Arriba como única referencia Pelvas.
En la
portería también contábamos con la baja de Dähne por lo que Uusitalo tuvo que
ocupar su puesto.
Pronto
cambió el guion del partido, Uusitalo recibió un golpe de Hjelm antes de
cumplirse el primer minuto de juego y tras este choque involuntario tuvo que
ser sustituido por el joven Koski que hacía su debut co n el primer equipo,
vaya papelón para el chaval.
Soisalo
dio el primer aviso, su disparo desde el vértice del área buscó la escuadra
pero salió fuera.
El
partido era malo y el HJK no creaba peligro, parecía que nos valía el empate,
nada más lejos de la realidad. Cumplida la media hora Hjelm disparó desde la
frontal, Koski no pudo blocar el esférico que quedó muerto dentro del área para
Ala – Myllymäki que a placer hizo el primero para el Ilves.
Acto
seguido Taiwo puso un balón con su pierna zurda al corazón del área, Rexhepi
llegó solo pero su cabezazo se fue incomprensiblemente por encima del larguero.
Al
descanso se llegó con 1-0 y con la sensación de que el partido se iba a perder,
el HJK iba camino de otro desastre.
No hubo
cambios pero el equipo capitaneado por un inconmensurable Dahlstróm cambió su
actitud y sin nada que perder se fue a por la victoria. Y es que, la actitud en
el fútbol es muy importante, y esta temporada nos ha faltado en más de una
ocasión.
A los
´51 Odu condujo un balón por banda izquierda y asistió a Taiwo que le dobló por
fuera, el centro del nigeriano le llegó a Rafinha que entraba por el costado
derecho, el brasileño controló y mandó el balón a la red, era el 1-1.
El Ilves
pudo marcar el segundo a la salida de un córner, afortunadamente el remate de
cabeza libre de marca salió fuera. Fue una jugada a balón parado una vez más
muy mal defendida por nuestra defensa.
En el
´83 Dahlström puso un balón en largo a Pelvas, el portero salió del área para
intentar despejar de cabeza pero falló y dejó el balón muerto a Odu, el
nigeriano recortó al portero y a un defensa y marcó desde la frontal con un
zurdazo que superó por arriba al defensa que intentaba evitar el gol bajo
palos, golazo y celebración por todo lo alto en el banquillo y en ese fondo
ocupado por nuestros seguidores desplazados a Tampere.
En el
´87 Dahlström culminó su partidazo con un gol, el joven canterano resolvió
dentro del área con su pierna derecha tras realizar una gran maniobra y irse de
su par al recibir un buen pase de Rafinha.
Koski
hizo una buena parada llena de agilidad para evitar el segundo gol del Ilves y
el partido finalizó 1-3.
Los jugadores y la afición celebraron una victoria que
nos da vida en la última jornada, veremos si se consume el milagro.
Alineación:
Uusitalo
(´5 Koski), Jalasto, Tatomirovic, Rexhepi, Taiwo, Annan, Kolehmainen (´68
Onovo), Dahlström, Rafinha, Odu (´91 Peiponen) y Pelvas
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