El HJK siguiendo con su dinámica negativa de este comienzo
de curso tiró por la borda el primer título al caer en nuestro estadio en la
final de la Suomen Cup por 0-1 ante Ínter Turku.
Más de 3500 espectadores se dieron cita en el Telia 5G Arena
para ver el partido en una tarde soleada que hacía presagiar una gran tarde de
fútbol, y lo fue, pero para el Ínter Turku.
Lehkosuo volvió a confiar en Rudakov bajo palos, Rafinha y
Jalasto ocuparon los laterales con Obilor y Patronen como pareja de centrales.
Annan y Dahlström formaron el medio centro con Alho por
banda derecha y Mosa un poco escorado a la izquierda, aunque nunca ejerciendo
como extremo, porque no lo es. Valencic acompañó a Klauss en punta.
En el ´23 llegó la ocasión más clara del HJK en la primera
mitad, gran jugada de Valencic desbordando a su par y dando el pase de la
muerte a Klauss que en su remate a bocajarro se encontró con el pie milagroso
del portero visitante. Una parada de balonmano llena de reflejos que evitó el
primer gol de los nuestros.
Tres minutos después Mansally lanzó una falta desde más de
30 metros que se estrelló en el palo, fue el primer aviso del Ínter Turku que
se asomaba poco por el área del HJK.
Y la primera mitad acabó así, sin goles. Con dominio del HJK
en el juego y con más opciones de adelantarse en el marcador pero sin poder
abrir la lata.
En la segunda mitad el peso del partido lo seguía llevando
el HJK pero sin ocasiones claras de gol, el equipo no estaba acertado en la
toma decisiones a la hora de finalizar las jugadas.
Y en el ´82 llegó el gol del Ínter Turku en una contra que
pilló a nuestro equipo dormido, Kallman recibió de espaldas en medio campo y
encimado por Patronen pudo habilitar al espacio para un compañero que por
velocidad dejó a Rafinha y encaró nuestra área. Furuholm ganó el duelo en
velocidad a Obilor y remató a placer, Rudakov despejó y el rechace le fue a
caer a Kuningas que también había estado más veloz y avispado que Jalasto.
A la segunda no hubo milagro y éste mandó el balón al fondo
de las mallas. Obilor y Jalasto partían con clara ventaja sobre sus oponentes
pero se duermen y permiten rematar en dos ocasiones tanto a Furuholm como a
Kuningas.
El milagro pudo llegar en el ´95 con una volea de Valencic
que pasó lamiendo el poste derecho de la portería del Ínter Turku.
Alineación:
Rudakov, Rafinha, Patronen (´85 Gamal), Obilor, Jalasto,
Annan, Mosa, Dahlström, Alho (´78 Vertainen), Valencic y Klauss
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