El
enfermo no mejora, el HJK tocó fondo ayer al tirar a la basura un partido que
estaba ganado, tirarlo a la basura de manera literal, y es que, no se pueden
encajar dos goles en el tiempo de descuento, y menos en tu estadio, y ante el
KuPS.
La historia
se repite, la temporada pasada el HJK quedó fuera de Europa tras un traumático
partido en Kazajistán y el equipo entró en barrena. Cayó eliminado en Suomen
Cup goleado por el IFK Mariehamn y sumó sólo 6 puntos en ocho jornadas.
Esa
nefasta racha nos costó el título. Este año llevamos el mismo camino, el equipo
cayó ante IFK Goteborg en Europa League y desde entonces no levantamos cabeza. Tres
jornadas, tres partidos en el Sonera y
sólo 2 puntos de 9 posibles. Los fantasmas del pasado han llegado al HJK y ya
se empieza a cuestionar a Mika Lehkosuo.
Ayer
hubo bastantes novedades en el once, Rafinha jugó como lateral derecho
desplazando a Jalasto al carril izquierdo. Ante la baja de Alho fue Peiponen el
elegido por Lehkosuo para ocupar la posición de volante o extremo por la banda
derecha.
Kolehmainen
siguió jugando en la posición de Atom.
Sólo
3000 espectadores se dieron cita en el Sonera Stadium para asistir al encuentro.
La primera ocasión fue para Morelos que en la primera mitad monopolizó todas
las acciones ofensivas del equipo. Su zurdazo en el ´3 se estrelló en la base
del poste.
A los
´13 Morelos remató de primeras un centro
de Jalasto pero el portero del KuPS voló para mandar el balón a córner.
En el
´18 Dahlström dejó solo a Morelos delante del portero pero su remate volvió a
ser despejado por el austriaco Kreidl, no había manera de abrir la lata.
En el
´36 llegó el gol, Kolehmainen recogió un balón en el área pequeña y lo dejó de
cara a Morelos que con su pierna derecha mandó el balón al fondo de las mallas.
Morelos
tuvo la última antes del descanso tras otra buena dejada de Kolehmainen su
remate se fue alto. El HJK ganaba pero su fútbol era lento y muy previsible,
mucho balón al pie, pocas rupturas en velocidad y nula movilidad.
El
empate llegó en el ´65 gracias a un magistral lanzamiento de falta directa de
Hakola. El derechazo superó la barrera describiendo una parábola perfecta y
alojarse en la portería de Dähne que aunque se estiró no pudo llegar a tiempo.
En el
´83 Morelos recibió de espaldas dentro del área, se giró con gran habilidad y batió por raso a
Kreidl, golazo y movimiento de gran delantero.
En el
´92 comenzó la hecatombe del HJK, un centro al área lo ganó de cabeza Ekwuekwe
ate la pasividad y casi complicidad de Peiponen y Rafinha, el balón le cayó a
Salami que se coló entre nuestros centrales y el balón entró llorando en
nuestra portería.
Un minuto después con nuestro equipo volcado en busca de la
victoria Forssell se resbaló al borde del área y el KuPS salió a la contra,
Rexhepi primero y Medo después perdieron dos balones divididos y los visitantes
se plantaron en nuestro área cuatro para dos.
Con el doble de efectivos Jovovic se adentró en el área y
dejó el balón atrás para Jaiteh que a placer marcó el tercero para el KuPS.
Locura de los jugadores, banquillo y aficionados del equipo de Kuopio.
El partido acabó con un disparo de Forssell desde el centro
del campo y una sonora pitada de la afición a nuestros jugadores.
Alineación:
Dähne, Rafinha, Rexhepi, Tatomirovic, Jalasto, Medo,
Dahlström (´91 Halme), Peiponen, Kolehmainen (´70 Forssell), Odu (´77 Gadze) y
Morelos
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