Esta
temporada no habrá triplete, el HJK cayó estrepitosamente en las finales de la
Suomen Cup, su verdugo fue el IFK Mariehamn que se divirtió ante su afición y
nos endosó un rotundo 5-1. El HJK no
encajaba cinco goles en partido oficial celebrado en Finlandia desde el pasado
31 de agosto de 2005, aquella tarde el KooTeePee nos ganó por 5-3.
El once
que presentó Lehkosuo fue muy novedoso, Thomas Dahne debutó bajo palos, y
estuvo horrible. La defensa la formaron Peiponen y Lehtinen en los laterales
con Heikkila y Baah de pareja de centrales. Kolehmainen y Moussi en el doble
pivote, Mendy en banda izquierda, Klinga por la derecha y arriba Atom y Jallow.
Nada
más empezar el partido Diego Assis hizo el primero con un disparo lejano, ni
Baah ni Heikkila salieron a taponar el disparo y Dahne, que pudo hacer algo
más, se vio sorprendido, 1-0 en el ´3 de partido.
En el
2-0 el IFK Mariehamn atacó por banda derecha ante la ausencia de Lehtinen que
había subido al ataque y estaba fuera de sitio, Baah fue a cerrar la banda pero
dejó un hueco en el centro que aprovechó Orgill para recibir y regatear a Dahne
para subir el segundo al marcador. Moussi intentó bajar a defender pero no
llegó a interceptar el pase. Desajuste grave de Lehtinen que nos costó el 2-0.
La
segunda mitad empezó bien, Mendy recibió en banda izquierda y jugó con Lehtinen
que se introdujo dentro del área para disparar cruzado, Atom llegó solo en el
segundo palo y empujó el balón a la red.
Fue un
espejismo, tres minutos después Dahne mandó un balón muy comprometido a
Kolehmainen, Tammilehto le presionó muy bien, robó el balón y se plantó solo
para batir de disparo cruzado la meta del HJK, 3-1 y otro regalo que nos
costaba un gol.
Y dos
minutos después el cuarto, lanzamiento de falta de Petteri Forsell que entra
por el centro de la portería, Dahne debería haber hecho algo más pero volvió a
estar muy desafortunado.
El
quinto llegó en un balón al área en el cual Lehtinen y Baah estuvieron muy
blanditos y permisivos, Orgill controló y marcó a placer el quinto. Era el
punto y final a una tarde para olvidar. Al termino del partido Moussi y Mendy fueron los únicos jugadores que se acercaron a la grada donde estaban ubicados nuestros seguidores para pedir perdón por semejante espectáculo.
Si el
jueves jugamos así en Krasnodar nos caen diez goles.
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